Mondelrodet

 

De las más que interesantes restauraciones

Del mismo modo que no existen dos coleccionistas iguales,tampoco hay dos idènticos restauradores.Es algo muy personal y que mi persona respeta,aún cuando en algunos casos no comparta,pero admito totalmente (como no puede ser de otro modo) el derecho a realizar qualquier restauración según criterios propios.

No voy a enumerar todas y cada uno de las formulas y maneras de restaurar de cada restaurador.Solo diré a modo de ejemplo,que los hay que se desviven por volver la pieza,sea la que sea,a su estado original.Es un buen método pero que a mi modo de ver borra totalmente el pasado de dicha pieza.

Uno que és un forofo de las restauraciones de viejos automóviles,observa que los americanos (que de este tema saben un montón) ,como realizan unas restauraciones donde eliminan todo aquello que puede afectar "la vida" de la pieza que se quiere restaurar,pero dejan bien visible la pátina que el paso del tiempo ha dejado marcada en la misma para siempre.Asi podemos ver automóviles o pick-ups tant en voga en E.E,U.U. que no han sido repintados de nuevo,dejan a la vista exterior las señales del óxido del vehiculo que el tiempo y las inclemencias meteológicas han dejado en su vetusta carroceria.Eso si,todo hay que decirlo,lo dejan tratado con productos especificos que de ningún modo el vehiculo en questión se oxidarà por esas señales.Al principio me costo adaptarme,pero en la actualidad veo que este sistema de restauración le da un encanto a la pieza muy especial.Si,por supueso ya se que és questión de gustos,pero me he preguntado muchas veces,en una caña por ejemplo de bambú refundido,que bien yo podria efectuar una restauración consistente en un rascado a fondo de las secciones de la misma hasta dejar a la vista el bambú inicial,pero eso si,con menos grossor que en su inicio,es decir que habré debilitado el material.¿Que hago pues?,sencillamente limpiar a fondo los tramos de bambú de la misma y una vez libre de impurezas,procedo a un barnizado a fondo que protege el material y no borra su historia.Asimismo con los metales,muchos diràn que como cromarlos de nuevo no hay nada igual.Es cierto,pero al árduo trabajo de hallar un cromador dispuesto a cromar de nuevo dichas piezas,este las dejarà relucientes como nuevas,pero les habremos quitado suus señas de identidad,y como en las monedas eso és su mejor presentación del paso del tiempo.Personalmente procedo a un limpiado del metal por sistema de fricción metàlica (si abrasión alguna) y un tratado final con limpiametales de calidad y nos queda una pieza cromada que luce de nuevo y que no pierde su identidad,su sello personal.Hace algunos años incorporé a mi personal biiblioteca un libro que se titula:"Las cosas nos hablan".Es un tratado maravilloso que nos hace comprender que el paso inexorable del tiempo que nos afecta a todos y a todo sin excepción,en los objetos inertes como una simple piedra del monte,nos deja una grabación que quén tiene una sensibilidad muy fina le hace comprender lo que ese objeto trata de decirle.Puede parecer una locura del escritor,pero uno que en muchas cosas ha percibido esas señales decidió por respeto a las mismas mantener las piezas como son y interpretar sus señas de identidad que nos hablan de otros tiempos,de otras gentes y de un mundo distinto al actual.

Enric Padrós director de mondelrodet