Sobre el pintado de los carretes restaurados

En muchas ocasiones me llegan preguntas referidas a la posibilidad de pintar el carrete restaurado.Existen dos teorias sobre el tema.Cada cual podrá elegir en función de su criterio y gusto la acción que le sea más grata.
En primer lugar están aquellos que con buen criterio nos dicen que los carretes para que no pierdan el hilo que poseen con su história y el paso de los años,deberiamos de guardarlos (veasé coleccionarlos) según lleguen a nuestras manos.Reparados,funcionando perfectamente,pero con los signos propios del paso de los años en la pintura del carrete.Forma parte de sus vivencias,y tiene su mérito conservarlo cual está.
Luego estará la tesis que dice que mejor pintar de nuevo el carrete en cuestión.Para empezar,un pintado correcto no és nada fácil realizarlo si no se dispone de herramientas al uso y medios suficientes.Pintarlos con el clásico spray és poco o nada ortodoxo y si no se tiene mucha práctica puede quedar una verdadera “chapuza”,con lo que hecharemos al garete un carrete de una validez extraordianaria.
Mi recomendación,és dejar normalmente los carretes tal y como llegan a nuestras manos una vez restaurados y liberados de suciedad,grasa,polvo,óxido y otras agentes agresivos y,únicamente pasar al pintado en los casos en el que el carrete requiera una urgente limpieza y pintado debido a una extensa corrosión del pintado del mismo debido a los agentes corrosivos anteriormente mencionados.
Finalmente indicar que para que el pintado sea lo más parecido al original deberemos desmontar totalmente el carrete en quaestión,teniendo en cuenta que en algunos casos podremos dañar alguna pieza,o adorno,de muy difícil localización.
Texto y fotografias arxiu de pesca Enric Padrós

Carrete MITCHELL 300

A modo de orientación...

Como aficionado al tema me place ver como de un tiempo a esta parte ha crecido de un modo espectacular el interés por el coleccionado de material de pesca y, muy especialmente por los carretes de pesca.Aún cuando nos hallamos muy distantes de muchos paises europeos en este tema,és muy importante haber dado el paso de gigante que en coleccionismo de material de pesca se ha dado últimamente.Como todo tiene su parte positiva y su parte negativa,pero ello hoy no va a ser motivo de comentarios.En este articulo quiero hacer llegar un mensaje de saludo,valentia y pequeña ayuda a los muchos compañeros de afición que se incorporan o que piensan hacerlo en breve a este sufrido mundo del coleccionismo de articulos de pesca.
Coleccionar es un arte,sin más.Como la pesca misma.Un arte necesita artesanos y quién si no será el propio aficionado coleccionista quién se convierta en un versado artesano de la restauración en el tema de los articulos de pesca.
Todos los coleccionistas soñamos con hallar piezas que sean: nuevas,que tengan su embalaje perfecto,su folleto interior y todos los complementos que estos dispusieran cuando eran nuevas para ser vendidas en el comercio correspondiente.Ese verdaderamente és un sueño y los sueños,sueños son,como dijo el poeta.Aún cuando a decir verdad en alguna que otra ocasión estos sueños se vuelvan realidad como por arte de magia.Todo es cuestión de buscar y buscar;”buscad y hallareis” dijo el maestro…
Pero para los casos más normales en los que lleguen a nuestras manos carretes de segunda,tercera o, ves a saber de que mano son,lo mejor és realizar la pertinente restauración en él,procurando siempre conservar al máximo todos los elementos del mismo.
En primer lugar será muy interesante disponer del plano de despiece del carrete en questión;tema este muy importante.Luego,una vez limpiado el mismo,será muy necesario saber que posibilidades reales de hallar recambios vamos a tener.Piensa que hay muchísimos carretes de los cuales no existe ni la más remota posibilidad de hallar recambios.Yo mismo dispongo de un buen arsenal de carretes sin recambio en mi archivo personal.Pero como todo tiene un halo de solución,cabrá recurrir al viejo truco de conseguir otro carrete de idénticas caracteristicas,para con los dos formar uno en el mejor estado posible guardando acto seguido el resto de piezas sobrantes para otra posible restauración o para facilitar estas a un buen amigo o compañero de afición.Sigue siempre el criterio de que vale más poseer un carrete al que le falta alguna pieza para completar (algún dia la puedes hallar,sin duda) que completarlo con piezas,que o bien son de otros modelos o marcas de carretes.Carretes restaurados asi pierden todo su valor real en el mundo del coleccionismo,el cual és muy exigente como debe de ser,al querer preservar la cultura e história de los materiales de pesca en su conjunto.
Estas y otras reomendaciones que son muy interesantes las hallarás en mi libro “El coleccionismo en el mundo de la pesca”,de fácil lectura y lleno de recomendaciones fruto de la experiencia de los años pasados frente a los articulos de pesca restaurándolos para que cobren nueva vida.
Texto y fotografias arxiu de pesca Enric Padrós

Madera de coleccionista

Madera de coleccionista

Como se suele decir,el coleccionista nace,no se hace.Uno que no peina canas debido a que ya hace mucho tiempo,el otoño se ensaño con su testa ofreciéndole una prominente alopecia,recuerda con sumo cariño como desde sus más tiernos años,la afición al coleccionismo ha estado siempre presente en sus actividades.
Ojeando mi libro “El coleccionismo en el mundo de la pesca” uno puede leer lo siguiente: “…no hay colecciones,sino coleccionistas”.Y me pregunto:¿Cómo definir a todo aquél que acapara para si indiscriminadamente mucho material con ánimo de lucro?.A uno le viene a la mente el vocablo:especulador,sinceramente.
No existe,que al menos yo tenga conocimiento de ello,una cátedra en las universidades donde se imparta la materia especifica del coleccionismo,pero si que existen múltiples cátedras donde se enseña la asignatura de história en sus múltiples facetas.
Realmente ser un apasinado coleccionista és colaborar de un modo desinteresado con la cultura de la história en sus distintas vertientesTodo aquél que no comprenda el coleccionismo de este modo,está falto de una madera excepcional con la que se moldean los verdaderos coleccionistas.Es muy complejo ser un buen coleccionista.Entraña tantas facetas que desgraciadamente no se dan en todos aquellos que se autodefinen como coleccionistas.Llevaria un extenso trabajo literario dar las pautas mínimas que debe mostrar todo buen coleccionista.Pero quizás sea interesante ir desgranando en diversos articulos los trazos más destacables que debe de configurar a todo buen coleccionista.
Una de las múltiples características a destacar es sin duda una verdadera pasión por aquello que uno colecciona.Uno llega a querer literalmente a esas inertes piezas que componen su estimada colección.Hay que saber apreciar el valor sentimental el cual estarà siempre por encima del valor económico (un valor económico que posee,sin duda) ,pero si nos ciega su valor monetario por encima de su belleza plàstica,y si sobretodo no sabemos “escuchar” todo lo que dicha pieza trata de comunicarnos de su propia história;de bellos y viejos tiempos pasados que ya no volverán;ellos que son los mudos testigos de épocas que solo perduran en la memoria de veteranos y viejos pescadores ó en las páginas de antiguos libros de pesca.Si uno no és capaz de cerrar los ojos y con esa vetusta pieza entre nuestras manos;no puede imaginar paisajes y bellas jornadas de pesca,nunca sabrá sentir el verdadero valor real de esta pieza.Ese és su valor verdadero y no el económico.
Dejemos para los revendedores este morboso “placer” de la especulación desmesurada;ellos tristemente nunca gozarán de la verdadera felicidad innata en todo buen coleccionista.Tratemos pués como se merecen esas verdaderas joyas del pasado con nuestro más profundo cariño en el silencio de la placentera soledad entre la história y nuestra afición.
Texto y fotografias arxiu de pesca Enric Padrós